Mostrando entradas con la etiqueta eccemas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta eccemas. Mostrar todas las entradas

martes, 27 de noviembre de 2018

DERMATITIS ATÓPICA

  El 27 de Noviembre es el Día Internacional de la Dermatitis Atópica.

  En este post os voy a hablar sobre ella, cada día más conocida y por ello más fácil de tratar.

  Hace tiempo, había poco conocimiento y pocos productos para tratarla, las mamis se agobiaban mucho cuando sus hijos la padecían. Hoy en día, al principio también se disgustan cuando a sus peques les diagnostican piel atópica, pero en seguida asimilan esta situación y se ven respaldadas por el pediatra, el dermatólogo, los farmacéuticos... Así pues, no hay que alarmarse en exceso. Hay que seguir unos hábitos de vida determinados, estar pendientes y seguir las indicaciones de los profesionales de la salud. 

  QUÉ ES LA DERMATITIS ATÓPICA?

  
  Es una patología inflamatoria crónica de la piel que alterna períodos de brotes con períodos sin brotes, también llamados como INTERBROTES o PERÍODOS DE REMISIÓN, cuya duración es variable.

Suele comenzar en la infancia, aunque puede ocurrir a cualquier edad. El 60% de los casos surge en el primer año de vida y hasta un 85% en los primeros 5 años de edad.

Se caracteriza por un déficit en la producción de lípidos de la piel.

Se manifiesta con enrojecimiento y descamación (eccemas), sequedad, picor intenso y riesgo de sobreinfección de la piel.

Es una patología multifactorial, pues itervinen factores hereditarios, biológicos, ambientales e inmunológicos.

Con las adecuadas medidas higiénicas y de hidratación, el bebé puede apenas padecer síntomas y evitar así los BROTES o PERÍODOS DE AGUDIZACIÓN, que requieren tratamiento.




FASES DE LA DERMATITIS ATÓPICA:

  Aunque suele aparecer en los bebés, se puede clasificar en 3 fases según la edad:

  - FASE DEL LACTANTE:  
Abarca desde el nacimiento hasta los 2 años de edad. El 75% de
    los pacientes desarrollan los síntomas en esta etapa. El intenso picor que sufren los 
    bebés puede provocarles cierto nerviosismo y dificultad para dormir a la vez que el
    rascado puede ocasionar sangrado e infecciones. Los brotes suelen ser intensos y
    frecuentes, pero tienden a disminuir al final del segundo año. En esta fase, los
    síntomas suelen aparecer en la carita, los brazos, las piernas y el tronco.

  - FASE INFANTIL: 
Abarca de los 2 años a los 12 años de edad. Es la continuación de la
    fase lactante. El niño puede mostrar una piel extremadamente seca y cierta
    descamación. En esta fase, los síntomas se manifiestan en párpados y áreas flexurales.

  - FASE ADOLESCENTE-ADULTO: 
Aunque ya a partir de la pubertad la incidencia de la
    patología disminuye, un 20-30% de los pacientes siguen sufriendo brotes crónicos. Los
    síntomas se manifiestan en cara, nuca, codos, rodillas, muñecas, tobillos y pies.








TRATAMIENTO:


   El tratamiento de la dermatitis es muy sencillo y tiene como objetivo eliminar el picor y desinflamar la piel, así como hidratarla y estimular la síntesis de lípidos para prevenir los brotes.
   Puede consistir en un tratamiento terapéutico, prescrito por médico, con medicamentos específicos, para tratar los brotes más intensos; o bien, un tratamiento con dermocosméticos farmacéuticos para evitar al máximo los brotes y cuidar la piel en todo momento. Lo ideal siempre es prevenir los brotes.

  - MEDICAMENTOS:

      
Corticoides e inmunomoduladores tópicos, antihistamínicos, antibióticos y 
    probióticos para estimular las defensas de la piel. 
    
  - DERMOCOSMÉTICOS:

   EMOLIENTES: Productos que hidratan y suavizan la piel, ricos en sustancias
    calmantes y aceites hidratantes, evitan sequedad e inflamación.
      En los BROTES se emplean como coadyuvantes del tratamiento medicamentoso, 
    pudiendo reducir en un 50% el uso de corticoides tópicos.
      En INTERBROTES, los productos ricos en ceramidas permiten restaurar las 
    características fisiológicas de la piel, mejorando así su función de barrera protectora.
      
    - HIGIÉNICOS: Se recomiendan detergentes sin jabón o syndets
      para piel atópica.

    IMPORTANTE: LIBRES DE PARABENOS, COLORANTES Y PERFUMES.




  

PREVENCIÓN DE BROTES:

  - BAÑO: La temperatura recomendada es de 30-35ºC (evitar baños muy calientes) y de
    no más de 10 minutos para evitar una mayor deshidratación cutánea. Preferible el
    baño a la ducha, pues el primero favorece la hidratación, facilita la penetración de
    crema o loción y relaja. Son recomendables las emulsiones sin jabón, sobregrasas y 
    con pH fisiológico. No es conveniente el uso de esponjas y se debe secar el cuerpo
    suavemente, sin frotar, mejor en toquecitos.

  - ROPA: 
 Ideal 100% algodón o seda, evitar lana y tejidos sintéticos
                   Evitar el uso de suavizantes en la colada.  
             
  - ESPACIOS CERRADOS: Eliminar en lo posible el polvo y los ácaros(evitar alfombras y
    peluches) para prevenir infecciones de la piel. Los purificadores ionizadores de aire
    son una buena opción. La habitación debe estar a una temperatura templada y bien
    ventilada, evitar cambios bruscos de temperatura y ambiente seco.
    
  - PLAYA Y PISCINA: Pese a que el verano, por el sol y el agua del mar, es beneficioso
    para la dermatitis y los eccemas, cuando las lesiones supuran pueden infectarse. Por
    otro lado, el cloro de la piscina reseca la piel. Es muy importante la fotoprotección
    total testado en pieles atópicas e hidratar con aftersun y la crema específica.
  
  - INVIERNO: El frío, el viento seco y los cambios de temperatura (frío-calor, calor-frío), agravan la dermatitis


  Las UÑAS, tanto de los padres como de los niños, deben estar siempre cortas y limpias
para evitar lesiones (sobre todo al rascarse); evitar productos irritantes (perfumes).

  Es muy recomendable prolongar la lactancia materna, pues aumenta las defensas del bebé y evita alergias.

 En las farmacias se pueden encontrar varias marcas de cosméticos específicos para el tratamiento de pieles atópicas:


foto cortesía de Eucerín


Foto cortesía de Isdin



Foto cortesía de Mustela

Foto cortesía de La Roche-Posay


Foto cortesía de Reckitt


Foto cortesía de Reckitt
Foto cortesía de Bioderma




Foto cortesía de Stada


Foto cortesía de Stada


 


 






Teresa Gil Alegre. Farmacéutica Adjunta.

   

domingo, 23 de marzo de 2014

CALÉNDULA

 Hoy en el post os voy a hablar de la Caléndula officinalis, conocida como Caléndula o Botón de oro. El nombre Caléndula deriva del latín calendulae, que significa calendario, haciendo alusión a la larga duración de su floración. En la época del Imperio Romano, era conocida como "Solsequium", debido a que sus flores se abren al amanecer y se cierran cuando se pone el sol.


 Pertenece a la familia Asteraceae o Compositaecuyas cuyas flores se encuentran formando una inflorescencia llamada capítulo rodeado de brácteas. A esta familia también pertenece la Camomila, el Girasol, las Gerberas...
 La Caléndula es una mata anual, aromática, de unos 50-70 cm. Sus flores son liguladas, de color naranja, en capítulos de 2-5 cm de diámetro.













Es bien conocida desde hace mucho tiempo por sus bondades medicinales.

 Es antiinflamatoria, antiséptica, cicatrizante, regenerante celular, antifúngica, analgésica, sedante, diaforética, vulneraria, emenagoga, antiespasmódica y colagoga.
 Sus propiedades antiséptica y parasiticida se deben a los activos de su aceite esencial, su acción antibiótica y fungicida son gracias a los alcoholes y terpenos que contiene.

 Se recomienda para afecciones dérmicas, oftálmicas, hepáticas, genitourinarias y de las mucosas.

 Se emplea para tratar inflamaciones de la piel, alivio de quemaduras, cicatrización de heridas, acné, eccemas, dermatitis, alivio de los dolores menstruales, hidratación de la piel, picaduras de insectos, hongos cutáneos, problemas hepáticos, da brillo al cabello.

 No debe utilizarse si hay sensibilidad o alergia a la Caléndula. No tomar vía oral durante el embarazo y lactancia. No aplicar en heridas abiertas.

 Podemos emplear la Caléndula en diferentes formas: pomadas, cremas, lociones, infusiones, cataplasmas, champú, geles, aceite...















 A continuación, os propongo algunos productos con Caléndula que se pueden encontrar en la farmacia:


WELEDA CALÉNDULA




KLORANE BEBÉ

           
APIVITA 
APIVITA


CALEDUFLOR DHU

BOIRON
BOIRON


BACTINEL


MUSSVITAL



Teresa Gil Alegre. Farmacéutica Adjunta.
EL NATURALISTA



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...